
Por alguna razón que aun no me acabo de explicar, Above simplemente trata de ser un disco con un sonido llevado al límite entre lo furiosamente rápido y lo lentamente industrial, lo cual lo lleva a comenzar con un furioso y lento pie izquierdo. Es correcto, este disco arranca con el pie izquierdo dado su perseverancia en usar uno de los elementos clave dentro del Black Metal, los blast beats. Puesto de una manera simple: a pesar de ser un factor que de entrada no es tan malo, ya para el tercer tema es simplemente insoportable ya que llega un punto en el que el tiro les sale por la culata y le da una zancadilla de aburrimiento a lo que debió de ser un gran disco.
Hablando a grandes rasgos los temas son buenos sin ser grandiosos, el problema es que tienden a sonar más parecido de lo que deberían entre sí, lo cual es un poco molesto si tomamos en cuenta el gran potencial de una banda como Samael para incluir elementos pintorescos dentro de sus composiciones. Normalmente cada tema es una lluvia de distorsión que acaba ahogándose en la monotonía de la furia que intentan emitir, y simplemente resulta en un disco con ninguna canción ligeramente memorable.
A pesar de esto hay que reconocer el intento de Vorph y compañía por intentar recrear un Samael muy rápido y directo en tiempos donde la calidad tiende a jugar un papel fundamental dada la gran cantidad de bandas que salen a la calle día con día. De una manera un poco cínica me atrevería a decir que Above es solo un capricho por cerrar ciclos antes de llegar a niveles más elevados y experimentales y empezar un nuevo ciclo creativo.