Septicflesh - The Great Mass

5/02/2011



Si hay un término que tiene a crear confusión es el de Symphonic Metal principalmente por la cantidad de bandas que se autodenominan como pertenecientes a tal nicho. Es innegable que hay muchas que realmente logran emular mediante el uso de teclados sonidos masivos y dramáticos una atmósfera de mucho peso y relevancia como para poder decir que casi suena a una verdadera orquesta pero a pesar de eso no logran tener cierto realismo en su sonido. Claro que nada le gana a usar una orquesta verdadera pero esto es algo no todas las agrupaciones pueden aspirar por muchas razones y entre algunos de los nombres más famosos por el uso de orquestas reales podemos mencionar a Dimmu Borgir, Epica y claro está la banda que básicamente dictó las reglas del juego, me refiero a Therion. Pero a pesar de que muchas otras buscan dar ese aire masivo a la música pocos realmente lo hacen sin sonar rebuscados y dentro de ese selecto grupo es que Septicflesh llega con The Great Mass.

La razón por la que esta banda griega logra abrirse paso con este disco es que estamos ante un caso de música bien hecha que cuenta con una participación genial por parte de Filmharmonic Orchestra of Prague, la cual es reconocida por ser una de las más buscadas debido a su extensa experiencia en la grabación de bandas sonoras de juegos de video. Pero no solo eso hace que The Great Mass sea una joya ya que los temas en sí son una mezcla perfecta de sonidos oscuros, pesados y misteriosos pero que nunca dejan de sonar frescos; de hecho después de varias repeticiones se puede encontrar elementos que antes no se percibieron.

Claro que un disco como este se hundiría en ambición si no contara con una gran producción y bueno, ese flanco está cubierto ya que el sonido masivo tiene el sello de calidad del siempre ocupado Peter Tägtgren (Hypocrisy). Hasta este momento no he encontrado un solo disco que haya sido producido por Tägtgren que no logre cumplir hasta con las expectativas más altas y evidentemente este no es la excepción.

Los temas abarcan varios estilos siempre dentro de ese marco casi cinematográfico que la banda busca darle a cada uno como es el caso en The Vampire of  Nazareth por ejemplo, donde tenemos un arranque que no es tímido en ser dramático y suena como una retorcida película bíblica, o Pyramid God que parece una pieza sacada del saco de composiciones de Therion pero con una malevolencia que los suecos no han logrado dar desde hace años; y si de sonidos macabros entonces no podemos evitar hablar de The Undead Keep Dreaming la cual es una perversa marcha fúnebre y ni que decir de Mad Architect, la canción que se podría considerar el clímax sinfónico del álbum. Hay un poco para todos los gustos pero eso tampoco hace que el disco sea un desastre sin dirección ya que si bien hay una mezcla de Death Metal, Black Metal y Gothic Metal los limites de cada uno se fusionan perfectamente como para no notar un corte súbito entre ellos y evitar sonar como ideas pegadas con cinta adhesiva.

Es curioso que Septicflesh sea una banda que ya tiene 20 años pero pareciera que no tiene la penetración de otras agrupaciones con menos trayectoria lo cual es una lástima. Por supuesto que esto no ha mellado en la forma tan excelente de hacer música pero de alguna manera simplemente ha hecho que estos griegos no pasen de ser una agrupación de culto a pesar de tener tanta relevancia como para ser toda una potencia mundial, especialmente desde que sus últimos trabajos se han inclinado por un sonido mucho más épico y sinfónico lo que les añade un poco de accesibilidad extra, pero puede que The Great Mass cambie eso. Si buscan un disco con una carga dramática fuerte, una que llega a niveles casi cinematográficos, entonces no veo razón para no comprar uno de los mejores discos del 2011.

-Calificación-
94/100

Andrés



También le puede interesar:

1 comments